El odio es un sentimiento emocional negativo fuertemente hacia otra persona. Lo único que quiere una persona que odia a otra es que la otra sufra y que lo pase mal. En este caso, el odio y el acoso tienen mucho que ver. La meta del acosador es que el acosado sufra y quiere hacer todo lo posible para que así sea.
Lo primero para acabar con ese odio es saber el origen. Puede ser por diversas razones: humillación, envidia, defectos físicos y morales de la otra persona...
Hay que intentar razonar con el acosador, sabiendo de dónde viene ese odio hacia la otra persona, que supuesta deba de ser inocente y aclararlo todo. En el caso que siga el acoso, hablar seriamente con el acosador para que cambie de actitud. Tiene que aprender que es imposible llevarse bien con todo el mundo, y habrá personas con las que no se lleve bien, pero no hay que hacerle sufrir ni humillar ante los demás, sólo ser tolerante con la persona. Si el acosador es positivo, se le puede proponer que empiece de cero la relación con el acosado y quien sabe, al final puede terminar en una amistosa relación.
Alexandra Raya
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